Intenso

Así calificaría este año que termina si tuviera que elegir una sola palabra.

Lo comencé llena de incertidumbres, miedos, desubicada, perdida, y con el corazón hecho pedacitos. Pero no sé que tengo aquí en las tripas que siempre me empuja a salir a flote sea como sea (eso, y buenos amigos). He vivido al cientoveinte por ciento siempre que me ha sido posible, he viajado como una loca, he conocido a gente estupenda... en definitiva creo que he ido colocando las piezas del puzzle como buenamente he podido.

Supongo que no es sencillo, pero si se empieza por poner encima de la mesa las cuatro cosas que de verdad importan y decidirse a pelear por ellas, se abren muchas posibilidades de sentirte bien contigo misma. Por cierto que de las cuatro cosas que importan una siempre debe ser UNA MISMA.

En cuanto a los propósitos de año nuevo, ya sabéis que yo los hago en septiembre, por lo que solo tengo que seguir con los que estoy cumpliendo y pegar un repaso a los que tengo aparcadillos.

Y le voy a dar ya a "publicar" porque me he dado de baja en ONO y me van a desenchufar el chiringuito en el momento menos pensado. Y pensaréis AAAAAHHHH morirás sin internet!!! Efectivamente, eso pienso yo! Pero que no panda el cúnico, que tan solo me cambio de compañía y aprovecho que estaré unos días fuera para dar la baja en uno y el alta en otro.

Esta noche ceno pato relleno de setas (mi madre es la mejó), como las uvas, salgo y brindo hasta el amanecer, y mañana con la resaquita no habrá nada mejor que:

1. Felicitarla por su cumple y por el año nuevo (sí, es muy práctica ella, y decidió nacer el uno de enero) mientras me dice aquello de "hueles a barra de bar".

2. Escaparme con ella al chollazo del año: casa rural para ocho que nos la deja para nosotras dos solas a precio de risa, y lo mejor de todo es que tiene un pedazo de jacuchi-cuchi (también para ocho pero será para dos) y con tele en el SPA, jaja! vamos a salir como un garbancito, no pienso salir del agua en los cuatro días!

Espero que paséis una noche maravillosa, que mañana durmáis mucho, y que el resto del año vuestro karma desprenda buen rollo por los cuatro costados. Y que sigáis pasando por el blog porque sabéis que me gusta escribir, pero más todavía que leáis, os haga sonreir, o reflexionar, o bostezar, o curiosear, o entreteneros, por supuesto comentarlo, en fin, que me gusta teneros cerquita!

PD. Oooooh, han llamado a la puerta y han traido esto!

Si ej que es pá comérsela. Lo dicho...

¡FELIZ 2010!

De Puta Madre

Estaba aquí viendo una peli repantingada en el sofá, envolviendo regalos navideños y dibujando. Y he pensado que tengo suerte, que tengo una casa calentita de puta madre, un coche de puta madre (para mí un ibiza de ocho años lo es), y una bici y unos patines de puta madre, una familia de puta madre, unos amigos de puta madre, una novia de puta madre, un trabajo de puta madre con unas vacaciones de puta madre, y unas ganas de exprimirlo todo de puta madre.

Pero por lo que me siento más afortunada es porque... sí, me han dado una tarjeta de socia del sex shop jiji!

Y otro video de los que os gustan. El otro día visitamos el Parque Warner y no sé si fue el frío, pero la tomamos con el pobre Supermán, jaja! ¿Os ponéis a la cola?

¡Desestresa mogollón!

Would you...?

¿Jugamos a las pelis? Es fácil, creo. De hecho bastante, pero ahí va.

Una boda, un padrino despistado, unos anillos improvisados... ¿de qué peli se trata?

Seguimos. ¿Y esta?

Vale no os molestéis, es mi pedida de mano en un Dunkin´donuts...

Y de postre, video de un coro callejero que nos encontramos paseando por el rastro y nos dejó a-no-na-da-dos, fue genial! El "a quién le importa" a veinte voces, y cañita a Espe y Gallardón al final, mola! ¡No os lo perdáis!

¡Feliz Navipeich!

Lo que más me gusta de la nochebuena es cenar con mis padres y mis hermanos, y sobre todo cenar para chuparse los dedos. Debería haber dos o tres noches de estas al año...

De aperitivo:

Jamón del rico, pulpo, ostras (aunque a mí plim), queso manchego (cómo no), foie sobre pan de pasas, peñascal y barbadillo bien frío y variedad de cervezas del mundo (ya un clásico).

De cena:

Cigalas, gamba blanquita de Güerva, quisquillas y percebes.

Caldo de mamá.

Steak tartare con un huevito de codorniz (mi madre es como arguiñano pero mejor)

Brochetas de fresas, plátano, melocotón, mandarina y frambuesa en la fuente de chocolate.

Cava para brindar (y yo que apuré la botella).

Pero lo que no tuvo precio fue jugar al Party con(tra) mi padre, y verle dibujar a Rambo, al Oso Yogui, y comprobar que como buen médico, es capaz de escribir la palabra "ordenador" en un nanosegundo (eso sí, lo entiende él). Lo de la mímica fue ya para mearse de risa. Intenté explicarle a mi madre la expresión "libre de polvo y paja", y se me ocurrió hacer gestos sexuales (polvo y paja, en fin) y tuve que dejarlo porque creedme, da repelús escuchar a tu propia madre diciendo la palabra masturbarse.

Por lo demás, ando ocupada en los regalos navideños, y como este año me siento artista (y pobre) he decidido fabricar yo misma los regalos. Y no, no voy a grabar cintas con canciones para todo el mundo como hacían en Friends. Me lo estoy currando y mucho, que tengo el salón que parece un taller clandestino de filipinos trabajando día y noche. Pero el resultado ha merecido la pena...

Para los pequeñajos...

Para los no tan pequeñajos, gayumbitos!

Y más camisetas...

La mayoría de los dibujos son plagios claro está, que bastante tengo con pintar y colorear como para ponerme creativa! Pero todo se andará. Empiezo a cogerle el aire y quizá termine dejando el trabajo y dedicarme al pinta, colorea, recorta y pega, que es desestresante y terapéutico a tope!

Espero que pasaráis una gran nochebuena, y que papá noel os haya traido muchas cositas. Que por cierto a mí jamás me trajo nada. Mis padres me decían que era porque vivíamos a las afueras y no le daba tiempo a llegar, y que tendría que esperar a los reyes, pero empecé a mosquearme cuando me percaté de que a mis vecinos de enfrente sí que les dejaba regalos el viejo gordo.

En fin, y a vosotras? ¿Quién os agasaja? ¿Papá Noel? ¿Los Reyes? ¿Ambos? ¿O directamente El Corte Inglés?

Disgayland

No sé si habíais oído hablar de "Ferdinando", un cortometraje de Disney ganador del Oscar en 1938. Yo lo descubrí hace poco en el curso de teatro y me pareció simplemente genial.

La historia tiene un argumento que podría resumirse con facilidad: animalito de dios que desde la más tierna infancia descubre que no es igual que sus otros congéneres. Ferdinando lo pasa muy mal desde pequeño, a él lo que le gusta es "aspirar el perfume de las flores a la sombra de un alcornoque", dice el narrador, y sabe que no es el bravío torito que todos esperan.

El picotazo de un insecto le juega una mala pasada y termina siendo reclutado para ir a la plaza y demostrar lo macho que tiene que ser es. El cuento es rico en situaciones que tienen "chicha gay" por un tubo, merece la pena pararse a verlo y sobre todo disfrutarlo! Lo que más me alucina es que se creara en 1938, y encima le dieran un Oscar. Debería ser obligatorio trabajar con este corto en el cole. Olé por ellos y por Ferdinando, el toro más mariquita que he visto en mi vida! También es divertido ver cómo nos reflejan a los españolitos los yanquis... ¡pincha y disfruta!

¿Para cuándo "Ramona", la vaca lesbiana que quiere conducir el camión de leche Pascual?

Canapieses Navideños

Como ya hice anteriormente con las croquetas, hoy os regalaré otra super-receta-secreta, aunque esta lleva el apellido "cutre" con mayúsculas, pero queda guay!

Cogemos una rebanada de pan bimbo y la espachurramos todo lo que podamos (se recomienda un rodillo, aunque todo vale, excepto sentarse encima). Si habéis sido unas cutres y lo habéis comprado con corteza, pues como diría Lorena Bobbit, habrá que cortársela, digo yo...

Se entiende que este paso lo hacemos con varias rebanadas, que luego untamos con lo que se nos antoje...

Después con mucho cuidadín, hacemos la rebanada ya untada una especie de rollito con mucho cuidado. Si de nuevo habéis sido unas cutres y habéis comprado el pan de molde de oferta (como ha sido mi caso), os quedará como esto que véis, por lo que recomiendo pan de molde un poco osssea de marca, que suele ser más esponjoso y compacto...

Después los envolvemos en papel de plata, o como diría Cris, papel Albal (aunque sea Bosque Verde), intentando que queden lo más apretaítos posible...

Más o menos tal que así... Y después los metemos directamente y derechitos al congelador!

Pasado el tiempo necesario para que se congelen a tope, los sacamos y los desenvolvemos. Si los habéis envuelto en el papel de aluminio bien compactos, quedarán así...

Ahora cogemos el mejor cuchillo que tengamos, y aprovechando que están congelados, los cortaremos en taquitos...

¡Y poco más! Quedará tal que así. Pudiendo jugar con los colores de los rellenos (salmón, sobrasada, paté, jamón, mi madre le mete hasta lechuga y tomate aunque hay que ser más habilidosa para eso).

Solo tener en cuenta que lo de sacarlos del congelador y cortarlos hay que hacerlo con el tiempo calculado para que cuando se vayan a consumir ya se hayan descongelado del todo, ¡no sus vayáis a dejar la piñata por querer comer unos simples canapieses! Yo de momento me llevo este platillo al piscolabis navideño de solfeo, jeje!

Y si esta navidad estáis espléndidas, podéis intentar hacer una torre con ellos a lo ferrero rocher...

¡Hala, que aproveche!

La Cenicienta Que No Quería Comer Perdices

La cenicienta tenía tantas ganas de ir a la fiesta... ¡que al final lo consiguió! Pero se puso tan ansiosa, que a la mañana siguiente no se acordaba de nada (llegó a las 12, pero a las 12 del día siguiente).

Pero ahí estaban esos dos señores, con el zapato de cristal de tacón de palmo y punta, esperando para que se lo probara. Al principio no le cabía el pie, pero apretó y apretó hasta que "cabió", y metió la pata porque... ¡se tuvo que casar con el príncipe!

Al príncipe le encantaban las perdices, pero la cenicienta es vegetariana, no come ni carne, ni pescado, ni lleva chupa de cuero, y aun así tenía que cocinar las perdices porque eran la comida preferida del príncipe. Se las cocinaba a la plancha, al horno, rellenas, fritas... ¡Están saladas! ¡están crudas! ¡estas están quemadas!, gritaba el príncipe malhumorado porque nunca cocinaba las perdices a su gusto. ¡qué disgusto! Y lo peor: tenía que ir subida en los zapatos de cristal de tacón de palmo... ¡y de punta! ¡qué vértigo!

Al principio intentó poner la espalda recta, pero se caía hacia atrás, así que se fue inclinando y por su espalda se le fueron deslizando todas sus ideas e ilusiones. Y la planta del pie chafada completamente. ¡Eso es horrible! ¡En la planta del pie están reflejados todos nuestros órganos! ¿qué hacemos en occidente con todos nuestros órganos chafados? ¡No, si es que aquí no se preactica la ablación porque no saben ni dónde cortar!

La cenicienta cada vez se encontraba peor: enferma, deprimida, perdida. Un día decidió contarlo: ¡qué rollo de príncipe, de zapatos y de perdices!

Vecina moderna: no te quejes de los zapatos, mi príncipe es moderno y yo voy subida en una plataforma de medio metro.

Amiga autóctona: no te quejes, a mi príncipe le encantan las vacas y necesito ocho microondas para calentarle la cena.

Una reina madre: no te quejes, ¿dónde vas a estar mejor que con un príncipe?

Colega republicano con perro: ¿pero tu no eres vegetariana y te gusta andar descalza?

Así que la cenicienta se confundió más con los comentarios de la gente, dejó de contarlo y se quedó sola. Solo tenía a su príncipe "amado", la espalda tocida, los pies chafados y el corazón destrozado.

Un día, tuvo la suerte de verse a sí mima...

Y le dió por reirse de sí misma, de lo inocente que había sido pensando que un príncipe la salvaría. Después de años viviendo con uno, se dio cuenta de que los príncipes no te salvan... tampoco los camioneros, ni los discjokeys, ni los pasteleros...

Dejó de sentirse culpable, se perdonó y se dio cuenta de que la única capaz de salvarte... eres TU MISMA.

Así que la cenicienta dijo BASTA, y apareció la hada que era una basta (he de contaros que las hadas son gorditas y peludas y morenas, que están dentro de nosotras y salen cuando dices "basta").

En cuanto la hada vio a la cenicienta, la abrazó y la estrujó, y la cenicienta en el momento en que se sintió recogida se puso a llorar. ¡Hacía tanto, tanto que no lloraba!


Primero empezó llorando por el príncipe, por tantas perdices muertas y por los zapatos. Luego siguió llorando al recordar que su madrastra la maltrataba, y que su padre la trataba peor y que sus hermanas casi se mueren por querer usar una 38 del zahara. Lo lloró todo. Lloró también dos vidas anteriores por si acaso (para no repetir karma) y se sintió mejor que nunca: ¡VACIA! (con el miedo que le daba a ella quedarse vacía). Ahora solo tenía que llenarse de cosas bonitas. Sabía que teniendo al hada basta al lado lo conseguiría.

En primer lugar dejó al príncipe (a pesar de que cuesta mucho dejarlos, es tan difícil que a veces repites dos o tres príncipes). Luego dejó los zapatos y las perdices. Y una vez sola, descubrió que quería disfrutar de su cuerpo que tan castigado había estado. Descubrió la danza libre, que no es tan libre pero que te hace sentir libre. En esta danza da igual que calces un 42, que peses 90 kilos, que midas 1,92 o que tengas 80 años.

Y así fue como encontró el camino de la transformacióna otros seres:

A la ratita presumida, que ha empezado a engordar y liga más.

La bella durmiente y blancanieves, que se están despertando (desintoxicándose del prozac).

La caperucita roja que le había salido violento el cazador, y debido a sus dioptrias emocionales no le vio la escopeta.

Pinocho que está harto de sus mentiras y sabe que necesita la verdad, y el hombre de hojalata que llorando, llorando encontró su corazón.

Una vez libres, pudieron realizar sus sueños, ayudándose entre sí. La cenicienta montó un restaurante-cabaret vegetariano llamado "Me sobra armonía", donde además de comer no paraban de bailar.

Ahora están encantadas de haberse conocido pero muy enfadadas por el papel que han tenido que representar en los cuentos durante siglos: "niñas pasivas esperando a que les pidan la mano y les quiten la vida". SE ACABÓ: han empezado un cuento nuevo: érase unas mujeres que no estaban solas y unas perdices que volaban felices.

FIN

(bueno, fin , fin... ya sabemos que los finales no existen, que todo continua...)

A cenicienta le va muy bien en el restaurante y ha contratado a un monton de colegas. Ahora abre también por la noche con el nombre: "Me falta armonía".

La ratita presumida ha conseguido llegar a una talla 42. Vive sola y feliz.

La bella durmiente y blancanieves han conseguido cambiar el prozac por otras yerbitas. Se han hecho muy, muy amigas.
Caperucita da talleres a mujeres maltratadas de "cómo superar la ceguera familiar".

El hombre de hojalata está enseñando a llorar a hombres, y ha montado un grupo que se llama "hombres que aúllan con los lobos".

Pinocho sigue buscando la verdad: ya ha probado con el Gestalt, el Diafreo, las Constelaciones familiares, las flores de Bach...

La reina madre ha abdicado y se ha ido de cocinera al restaurante vegetariano. Insiste en que el jamón bueno no es carne. Su consorte ya casi no la ve, está encantado de tener tiempo libre. El amigo republicano con perro, desde que ha salido en este cuento no para de ligar.

Y el hada sigue apareciendose cada vez que una mujer dice: BASTA.


Mi madre me regaló ayer este maravilloso cuento, que antes de ser editado fue publicado en internet para difundirlo y conseguir una editorial que lo publicase. Os dejo el enlace porque merece la pena ver todas las ilustraciones, y si lo véis en papel echadle un vistazo porque lo disfrutaréis mucho más si cabe.

La cenicienta que no quería comer perdices

Dudas Existenciales

He madrugado, he conducido cien kilómetros, son las once de la mañana y ya estoy de nuevo en casa. Porque sí, yupi! Yupi infinito! Han cortado las clases por el temporal!

Así que calefacción a tope, un poco de marujeo, quizás una siesta del borrego/carnero/burro/cordero, o si estoy con ganas me lio a hacer las croquetas para la cena del viernes. El caso es que es hoy a las criaturas las aguantan sus madres, jiji!

Finde de mus (perdí), de tabú (gané), de pádel (empaté), de bajarme el disco del canto del loco con (algunas) versiones chulas de canciones de otros grupos, de cervecillas y tapas (gran invento), de patatas asadas en el horno (a falta de chimenea), de más pádel (gané y pasamos a la siguiente ronda), y de más cosas que no se cuentan (porque pá qué).

Y bueno, pasando a temas más interesantes, os recordaré que hace tiempo hice una encuesta en el blog, donde cada una opinó sobre la posición adecuada para el rollo de papel higiénico...

El resultado de aquello fue que cada uno lo pone como le da la gana, y aunque creo que con la siguiente cuestión ocurrirá lo mismo, he de preguntaros un par de cosas que no tienen nada que ver entre ellas pero que me inquietan:

1. ¿Laváis la ropa nueva antes de ponérosla por primera vez? ¿Y concretamente la ropa interior?

2. ¿Cómo llamáis al spray matamoscas? Fu? Fli? Fufú? Alguna otra manera?

Como bien sabéis este es un blog que plantea cuestiones fundamentales para la humanidad, y espero que colaboréis con vuestra experiencia para ir dando respuestas a temas tan inquietantes!

Carta De Amor (en la ESO)

Bueno, como es viernes y hay que terminar la semana sonriendo a toda costa, os dejo una joyita que me ha llegado. No he sido capaz de subirla al blog con un tamaño que os permita leerla directamente del documento en cuestión, aunque solo tenéis que hacer un simple click sobre la imagen (y si no, la tenéis transcrita justo debajo aunque pierde algo de encanto). Sea como sea, al terminar de leer...

- No os preocupéis por la tensión de Jeni, ya está estabilizada.

- Los problemas de astringencia también.

- Broque: edificio de viviendas donde habita la muchacha en cuestión.

- Borbel: título de la exitosa película de Almodóvar, y por otro lado, objetivo de la Jeni a toda costa.

"Jonatan haber por que has cortado conmigo por que yo quiero ser tu novia cariño y aber yo no edicho que esta mos sali endo anadie sabes guapeton que hijo cuando telebantastes la camiseta padre me bajo la tension y los cuadra os que tienes hay me esta bajando la tension haora que tienes hay me esta bajando la tension haora Jonatan y te acuerda cuando me estabas tocando la pierna Jonatan tenia ganas de darte un beso honbreton y hayer en el patio tanbien meha bajao la tension de berte Jonatan siempre quete beo Jonatan me baja la tension hijo si es que yo quiero borbel contigo Jonatan por favor Jonatan por fabo Jonatan por favor te lo suprico Jonatan guapeton hombreton hijo que siempre que te beo me baja la tension Jonatan Jonatan por favor no me agas esto Jonatan por favor Jonatan buelve con migo que estoy por ti que no cago asta melo dice la Leti hija Jeni que estas por el que no cagas Jeni hija que estas por el que no cagas me dice la Leti y sabes por donde bibo Jonatan donde me bistes en el chino en el broque que está pegao pues hay bibo y todos los dias a las 4:00 estoy rondando con mis primas Jonatan paque sepas donde bebo guapo"

¡Que tengáis un gran fin de semana!

Y recordad, si o encontráis con el Jonatan no le subáis la camiseta o sus bajará la tensión!

Touché

Tengo la sensación de que todo es una broma pesada, un sueño de esos raros. Y que mañana cuando llegue al instituto él aparecerá en clase, tarde como siempre, saludando sonriente, con sus andares desgarbados y ese aire de despreocupación ante reprimendas y castigos. Me preguntará si puede tumbarse a escuchar su mp3, o quizás me pida un balón de fútbol prometiéndome no molestar al resto de la clase, aunque igual le da por mostrarse servicial y ayudarme a sacar material y mandar callar a todo el mundo cuando explico.

Estoy descolocada y triste. Sé que si sumas una serie de factores de riesgo en la vida de un adolescente, solo tienes que sentarte a esperar a que éste cometa mil y una irresponsabilidades. Pero no concibo, no asimilo que por todo ello se le haya terminado la vida. Que vaya a perderse tantas cosas, que ya no haya nada más para él.

Oye, si andas por algún lado y me recibes, pórtate bien, vale?

El Puente: Ese Gran Invento

Se ha terminado el puente, y como he dormido como una marmota, ahora me encuentro insomne perdida...

Ha habido de todo un poco, y en conclusión, vengo contenta y con la mente y el cuerpo de lo más despejado y relajado, para afrontar los diez días que me quedan para enganchar con las vacaciones de navidad, yuju!

Comencé el viernes pegándole un sablazo a la tarjeta, pero fue por algo que se había convertido en primera necesidad: reponer abrigo para el insti, ya que el otro fue a la basura el otro día después de haberme dado sus servicios casi a diario, (y algún viaje a esquiar) durante siete años... ya era hora no? Lo compré en la tienda de la Azu, un clásico donde siempre encuentras lo que necesitas si se trata de abrigarte.

A esto le siguieron unas cañitas por ahí, y otras más en un maravilloso piso en La Latina, que mi amigo Xadilla (pronúnciese como "quesadilla" pero muy rápido) ha conseguido alquilar a una pareja de bolleras que después de haberlo reformado y haberlo puesto guapo guapo, van y rompen. Mal por ellas, bien por nosotros que tenemos el Typical Spanish justo abajo, donde fui pedida en matrimonio (rodilla clavada en el suelo incluida) con un anillo luminoso de los chinos.

También ha habido tiempo para ir al teatro, y se trataba de magia así que disfruté como una enana. El Mag Lari, altamente recomendado, te partes de risa y no pillas ni un truco. Apto para todos los públicos (estaba plagado de niños, maldita sea, jaja!).

Más cañas, más esquivar gente por el centro de madrid (aggg), visita a chueca donde hice mi jugada maestra y metí un pie en un agujero de la acera y me hice uno de mis ya famosos esguinces. Cuidadín con Infantas esquina Barbieri, falta una baldosa! Aparte de esto, conseguimos llevar a las mariquitas enamoradas al Fulanita, que vieron mucha bollera guapa y les pareció extraño, si es que los tópicos los tienen engañados, con la de bollitos guapas que "habemos" por ahí, jiji!

Y llega el momento de confesar: sí, he ido al cine y he visto...

He de admitir también que me rei, cosa que no esperaba demasiado, pero qué voy a decir que no sepáis, si Chiquito aparece en escena yo me río, no lo puedo evitar!

Y bueno, he ejercido un poco de bollito visitando el decathlon, colgando unas estanterías taladro en mano... en fin, esas cosas!

Aparte de la crónica del puente, he decir que tengo la sensación de que ultimamente los blogs están un poco a medio gas! Unos cierran por visitas indeseadas, otros no actualizan y parecen abandonados, otros lo hacen pero cada mil años... joooe anda volved que sos echo de menos! supongo que va por rachas y me parece bien, pero nada de pereza ein?

¡Ea, feliz mini-semana!

How I Met Her (Last Choice)

Decidí salir de la pequeña ciudad para pasar el fin de semana en algún otro sitio, con amigos, despejarme y no pensar en lo perdida que me sentía desde hacía meses.

Cañas, compras, paseos, charlas, música y risas. Así trascurría el fin de semana. Mi amiga Pili me insistía en que lo que necesitaba era encontrar una mujer con la cabeza y los pechos en su sitio que me quitase todas las tonterías, mientras que Mili opinaba que lo mejor era quedarme quietecita y no meterme en más relaciones por el momento, y continuase en fase picaflor.

Yo no tenía muy claro si necesitaba una cosa u otra, pero al final Pili se salió con la suya y decidió mandar un sms a su amiga M., que cumplía una serie de requisitos que le parecían imprescindibles para ser candidata a presentármela y ver qué ocurría...

- Entendía.
- Era mona.
- Era maja.
- Era profe.
- Jugaba al pádel.
- Jugaba al mus.
- Estaba dentro del umbral de locura soportable entre bolleras.

Nunca me habían liado para una cita a ciegas, aunque fuera una cita a cuatro, pero me pareció divertido, y además no tenía nada que perder.

Nos sentamos en una terraza a la espera de que llegase y entretanto me la iban vendiendo. Ya verás, cómo no había caído antes en presentártela, es genial, bla bla bla... yo comenzaba a sentirme un poco nerviosa porque me daba una vergüenza increible, lo único que me tranquilizaba es que ella no sabía que iba a una encerrona, por lo que la situación no sería tan tensa, ella simplemente bajaba a tomar algo con sus amigas, y de casualidad pues... allí andaba yo pasando el fin de semana.

La intuí de lejos, y al llegar saludó sonriente mientras se quitaba las gafas de sol y se soltaba los botones del abrigo. Pidió una jarrita de cerveza (punto para la niña!) y se sentó a mi lado, casualidad casualidosa.

Pasamos mucho tiempo en aquella terraza, hablamos de cosas tan insulsas como el tiempo, por supuesto el tema profes dio de sí, muchas tonterías, recordaron historietas de su infancia, y yo terminé confesando que una vez me quedé encajada en un "donut" de un parque acuático (nota mental: contaros en un post este maravilloso episodio de mi vida, jaja!). Entretanto Pili y Mili se encargaron de soltar perlitas que dejaran claro: a) Mi soltería, b) La acera por la que camino. Casi las mato, no sabía dónde meterme...

Hicimos planes para por la noche, y quedamos en dormir un rato, ducharnos y volver a la carga luego con las pilas a tope. Nos despedimos hasta entonces y aunque aseguro que yo no estaba muy receptiva, me envió una mirada que interpreté como "un poco asíN", que me gustó. Al llegar a casa ya me estaban bombardeando con preguntas, impresiones, y yo que soy muy prudente mandé su gozo a un pozo y me limité a comentar que sí, bueno, era maja.

Dormí, me duché, me puse guapa, y allá que fuimos. Habíamos quedado un grupo grande de gente, y para no variar, llegamos tarde por culpa de Pili. Entramos al local y la busqué con los ojos. No la veía. No estaba! Mierda. Tampoco quería preguntar directamente porque no se notase mi especial interés porque ella estuviera. Pitó un sms en el móvil de Mili, que nos leyó en voz alta: "Nenas voy tarde, pero eso no me lo pierdo. Llego enseguida!" Me vacilaron un poco con el "eso no me lo pierdo" y yo respiré, me relajé y empecé a divertirme porque sabía que aparecería en un rato y la noche pintaba mucho mejor así.

Volvió a pedir una jarrita de cerveza y volvió a ponerse a mi lado. ¿casualidad casualidosa? Empezamos a hablar y hablar, y cuando reaccioné me di cuenta de que estábamos a nuestro rollo, a un par de metros del resto. Me contó historietas sobre su ex-novia la psicópata, su ex-novia la histriónica y su ex-novia la normal (sí, me tranquilizó que también hubiera tenido una novia normal). Yo le resumí un poco mis movidas sentimentales pasadas y recientes, me trasmitía confianza y no me importó hablarle de eso a una casi desconocida. A todo esto, me seguía mandando miradas un poco asíN que yo no era capaz de aguantar y terminaba por desviar mis ojos a otro lado al empezar o terminar una frase.

Nos trasladamos todos a otro sitio, más oscuro y con la música más alta. Nos hicimos fotos, bailamos, hicimos el gili, nos hablamos al oído (ya sabéis, con la música alta tiene que ser así), y así pude descubrir cómo olía, uf!

La noche pasó volando y salimos del pub con la luz del día. El tonteo había sido más que evidente pero no había pasado de ahí. ¿Supongo que conocéis esa sensación entre dos personas de estar deseando besarse y que no surja el momento? Si me hubiera pillado con más morro habría hecho algo para quedarme con ella, pero terminamos por despedirnos con dos besos en la cara cargados de tensión sexual mientras me cogía la mano.

Yo dormía en casa de Pili, que a la mañana siguiente tenía que salir de viaje temprano, y se marchó dejándome con permiso para seguir durmiendo a pierna suelta sin límite de hora para poder conducir descansada. Desperté, estuve mirando al techo un buen rato recordando todo lo que había ocurrido la noche anterior, valorándolo con la mente despejada, y entonces sí, decidí hacerme con su móvil y busqué la excusa perfecta (y absurda) para llamarla. Se había dejado su tabaco en mi bolso. Yuju!

Le envié un cauteloso sms que me respondió al instante con una llamada. Era más valiente que yo! Directamente me propuso comer juntas, llevarme a ver "la cueva del diablo" (sitio por lo visto muy bonito, del que habían hablado el día anterior, donde jugaban de peques y donde se dio su desastroso primer beso con lengua).

Todo fue genial, me sentía mucho más relajada, y ella también. Comimos, fuimos a la cueva, y entramos linterna en mano. Flipé porque era un sitio increible, y le pregunté dónde había sido su horrible beso. Me llevó hasta allí, y la tensión sexual cortaba el aire, por lo que muy en mi línea, empecé a comportarme a lo Chandler de Friends, es decir, hacer chistes malos para ocultar mi estado de nerviosismo incontrolable. La primera gracia me la rió, y mientras decía la siguiente chorrada se me acercó decidida, me miraba justo a los ojos y se quedó parada delante de mi boca, no sé cuántos segundos estuvo ahí, pero terminé besándola, rompiendo el maleficio de su desastroso primer beso con lengua en aquella cueva.

Y bueno, qué decir, pues lo que ya sabéis, que hasta aquí puedo leer y que todo parecido con la realidad es pura coincidencia. Ah, y que esta vez me he enrollado más relatándolo, sorry!