10 nov 2008

Mis Diez Metros En Bolas

He vuelto a La Era Del Calentamiento Global. El otro día se presentó el técnico en casa, y se prestó a arreglar la caldera por el módico precio de 80 euros, teniendo tan solo que sustituir una rosquita de plástico por otra. Una ganga, vamos...



De todas formas quise celebrarlo dándome un pedazo de baño calentito con espuma y patito de goma (no
el patito que pensáis, guarronas). Estaba yo tan agustito cuando suena el móvil, tengo que salir de la bañera dejando el rastro de agua por toda la casa, y quedándome congeladita.


Cojo el teléfono, me preguntan si es posible que el técnico se haya dejado su móvil en mi casa. Me toca ir a la terraza y comprobar que sí, que se lo ha dejado. Me dicen que pasará más tarde a recogerlo. Me meto de nuevo en la bañera. Cuando empiezo a recuperarme de la primera salida, suena el telefonillo de casa. Me toca salir de la bañera de nuevo y en las mismas condiciones. Es el técnico, que se ha dado mogollón de prisa. Mi amigo WilliFog ya me había advertido que el rollo de que vaya el técnico a arreglarte la caldera puede ser situación de película porno, y en plan serie R (de risa), empiezo a pensar que podría ser. Yo, en pelota picada corro por el pasillo a contestar al telefonillo dejando atrás un rastro de agua y jabón por todo el parqué. En la última curva, antes de entrar en la cocina, mi pie derecho no se agarra al firme de la forma en que yo había calculado. A mi pie derecho le sigue mi cadera, y mi culo, y mis hombros, y mi cabeza. Y me pego el ceporrazo padre, llevándome en mi vuelo hacia el suelo el telefonillo, que cae al suelo y se parte en mil pedazos. La imagen es dantesca. Yo en pelotas, el pelo chorreando, el telefonillo partido en trozos, y el charco de agua rodeándome. Me levanto como puedo y abro (porque el botón de apertura no se ha roto). En mi portal hay que abrir dos puertas, y para poder abrir con el botón tienen que haber llamado previamente, así que mi querido técnico no puede llamar para que le abra la segunda puerta, y entonces voy a mi habitación y me visto para bajar en plan rápido con esto, Y SÓLO CON ESTO:






1. Chaquetón para no morir congelada. Recordemos, sin nada debajo.








2. Pantalones para no morir congelada. Recordemos, sin nada debajo.







3. Zuecos con los que se me quedaron los pies congelados. Recordemos, sin nada debajo.


Cuando me recuperé, vacie la bañera y le dieron por culo al relajante baño concluyendo varias cosas:





1. ¿Por qué me dí tanta prisa en abrir al técnico? Que se hubiera esperado! Soy una cagaprisas.




2. ¿Por qué no me puse el albornoz y las zapatillas para ir abrir al telefonillo? Soy masoca.




3. ¿Por qué, después de haber caido al suelo de esa forma no me vesti tranquilamente en vez de vestirme a toda leche y de esa forma tan poco apropiada? Soy una cochina.







La moraleja que podéis sacar de todo esto podría ser:




Si se te rompe la caldera y después de una semana te la arreglan, no la celebres con un "buen" baño calentito, compra un poco de confeti e invítate a unas cañas, sale mucho más a cuenta.






6 comentarios:

Mireia dijo...

jajaj, menuda imagen!!!

a quién se le ocurre salir de la bañera para coger ell móvil?? ese fue el primer error!!!!!

y sabiendo que venía el técnico, pa qué te vuelves a meteer?

en fin, no pasó nada no cuando te vio chorreando, y sin nada debajo?

la+ dijo...

jajajajajaja qué descripción de los hechos !!! épica !!


Estoy con la de arriba , a mi no me sacan de la bañera ni quemando el telefono

cris dijo...

jjjajajajajja
Pues yo hubiera hecho lo mismo que tú, y seguro que el hostión hubiera sido considerable.
jjajjajaja lo siento, pero es que te estoy viendo mentalmente jjjajajaa

Superbaturra dijo...

jajajjaja, joder maja, que manera de joderte un baño genial! Eso es el Medio Ambiente que quiso joderte por lo de gastar tanta agua y esas cosas y te envió al "técnico tocapelotas de turno", jajajaja

LA DESGRACIÁ dijo...

Te cobró 80 euros...haberte quedado el movil!!!

PD. Berska esá llena de camisetas de la hormiga atómica!! Ataca""

Besus

Anónimo dijo...

Ja, ja, ja... el móvil nos tiene enganchadas... ¡qué horror!