See You Later, Lucas!

¡Vacaciones! ¡Yuju!

¡Que disfrutéis! Y recordad, no hágáis nada que yo no haría...

Próxima Estación...

En la recámara de las fotos-chorra tenía guardada la siguiente. La hice en el metro y no daba crédito...

(¡Esto sí es memoria histórica!)

Y ahora sin nada que ver con lo anterior, os lanzo una pregunta sobre la que he estado hablando con los alumnos esta mañana (y me partí de risa con sus respuestas, claro)...

Si tuvieras que elegir (a la carta eso sí) un trabajo y una ciudad para el resto de tu vida, ¿qué elegirías?

Querer Saber Decir NO

Las recomendaciones del día son los restos recalentados del fin de semana...

¿TE HACE UN CINE?

Era de lo poco visible en la cartelera y bueno, no estuvo mal. Estoy contenta porque hace tiempo que no salgo del cine con cara de gili, siempre acertamos! Y Noriega sale taaan guapo!

LA MANCHA PROFUNDA

La plaza de San Carlos del Valle es para sentarte en una de las esquinas a comer pipas y no aburrirte de mirar...

También ha habido tiempo de orden y limpieza. Ahora tengo un armario en el que una balda está dedicada a los trastos de deporte (patines, raquetas, pelotas, etc.), otra a manualidades (gomaespumas, cartones, pegamentos, fieltros, ...), otra a mochilas, maletas, saco de dormir y esas cosas, y un rinconcito para guardar la aspiradora. Yo no quería! Soy una calzonazAs! Antes tampoco estaba tan mal...! aunque antes me parecía oir voces dentro de ese armario...

Y hablando de cosas a las que me han obligado, jeje...

(Conversación hace unos días entre una amiga y servidora)

- ¿Qué vas a hacer en Semana Santa?

- Pues la verdad es que poca cosa, como mucho un fin de semana al norte a ver a una amiga.

- No te lo crees ni tu, siempre que dices eso luego te falta tiempo para ir y venir aquí y allá.

- No, ¡esta vez va en serio!

- ¡Tururú!

Y pasó lo que tenía que pasar... si es que yo no quiero, ¡pero me lían!

¿Alguien me sopla un truco para querer saber decir "NO"?

El Puente PePero

Bueno, parece tema común de posteo ultimamente y por algo será: lo de que esto está de capa caída, mucha visita, poco comentario e intercambio en general; y que las nuevas generaciones (arg, qué PePero ha sonado eso) se abren paso... me siento una viejuna, jaja! Pero como dice la canción, I Will Survive, y aquí seguimos contando cositas, sobre todo con tal de no ponerme a corregir lo que me queda y hacer notas medias (Grupo Facebook YA: "Que las notas se pongan en base a lo simpático que seas").

Que viva el día del padre, el corte inglés, el PP (el Padre Putativo san josé, quiero decir) y todos los que han hecho posible este minipuente, en el que me voy a rascar la barriga, jugar al pádel, hacer turismo autóctono, patinar, y cumplir con mis obligaciones maritales (y no me refiero a pasar la aspiradora).

Os dejo este mini vídeo, en el que en tan solo 6 segundos averiguaréis hasta qué punto estáis más salidas que el pico de la plancha...

¿Qué habiáis pensado cacho guarronas?

¡¡¡que no tiene ombligooo!!!

Marcela y Elisa

El domingo me llevé una grata sorpresa cuando al volver de patinar con La ÑiÑa (merece capítulo aparte), nos sentamos a tomar una servesita y leer el periódico, y me encontré con esta curiosa historia en el dominical de El País...

Más de 2.000 mujeres lesbianas se han casado en España gracias a la ley de Zapatero de 2005. Pero este avance social tiene un sorprendente precedente: Marcela y Elisa se casaron en A Coruña en 1901. Por la Iglesia. Pero las descubrieron, la justicia las persiguió y la prensa se ensañó con ellas. Una valiente historia feminista recogida ahora en un libro.

Miren a la izquierda (aquí en mi blog, un poco más abajo). Dos muchachas serias. Vestidas de negro. No es un entierro. La imagen parece triste, pero es una foto de boda. El triunfo personal de Elisa y Marcela. Se casaron en 1901. Por amor. Porque querían ser libres. Porque sí. La foto no cuenta los palos que les dio la vida. Comienza una historia real que parece novela.

–¡Ay, mamá! ¡Si vieses qué amiga más simpática y más buena tengo! Estoy encantada.

Un día, Marcela le soltó esto a su madre, y ya nunca se separaría de Elisa. La relación entre las dos chicas fue intensa desde el principio. Sentían la necesidad de estar juntas siempre. A toda costa. La madre de Marcela diría a un periodista: "Yo, que dominaba a mi esposo y que podría dominar a un regimiento con caballos y todo, no pude hacer nada bueno de ella". Marcela y Elisa se fueron a vivir juntas a Dumbría, un pueblecito coruñés a cuya escuela fue destinada la primera. Después de un tiempo, las dos muchachas fingieron pelearse. Era parte de una estrategia: Elisa dijo que no aguantaba más, que se iba; Marcela anunció que se casaría con Mario, un primo de su amiga, y se anticipó a los futuros comentarios:

–No he visto cosa más parecida a Elisa. Es de su misma estatura, tiene la misma voz e iguales maneras. ¡Hasta su mismo genio!

Elisa se fue un tiempo a A Coruña para transformarse en Mario: se cortó el pelo y empezó a usar trajes de chaqueta y a fumar. Para casarse, tenía que estar bautizado como hombre, así que se presentó ante un cura para convertirse al cristianismo. El cura ni lo miró bien: no dudó en ganar un creyente para la causa católica.

La boda se celebró el sábado 8 de junio en la iglesia coruñesa de San Jorge. A las siete y media de la mañana. Discreción. La pareja se hizo un retrato en el estudio del fotógrafo francés José Sellier. Como toda pareja feliz. Y al día siguiente volvieron a Dumbría en la típica diligencia de la época. Una señora que también iba dentro no se pudo reprimir:

–Si no es doña Elisa, es el diablo en su figura.

La mentira duró poco.

Así fue la primera boda homosexual en España de la que se tiene constancia, 104 años antes de que Zapatero promulgara la ley que permite los matrimonios entre personas del mismo sexo. A comienzos del siglo XX, dos maestras de escuela reventaron las conciencias santurronas y biempensantes de la época de la Restauración. A nadie le entraba en la cabeza.

Me pregunto cómo habría sido mi vida si hubiera vivido durante esos años, o los posteriores ya con el franquismo.

¿Sería tan "valiente" como lo soy ahora?

¿Sería yo una de esas mujeres que se cuenta que vendían aguardiente en El Retiro y mantenían relaciones entre ellas? (Vamos, las inventoras del cruising...).

¿Y vosotras?

Si queréis conocer más detalles de esta bonita historia, aquí tenéis el enlace de El País.

¡Que lo disfrutéis!

Los Siete Pecados

SOBERBIA es ir contigo de la mano por el mercado, tocarte el culo cuando hay albañiles mirando, soberbia es ser más fuerte que la muerte si vas a mi lado...

PEREZA es mirar desde la cama que te vas al trabajo, la tele encendida y tus ojos cerrados, querer dormir el sueño eterno contigo en un piso alquilado...

GULA porque eres mi menú del día, y lo que sobre me lo como recalentado, gula como un vampiro, y me sabe a sangre el rojo tu pintalabios...

ENVIDIA le tengo a tu esponja, a tu peine, a tu tanga, a tu piel por llevarte siempre pegada, envidia le tengo al silencio cuando te quedas callada...

IRA por pegarle al sol si te quema demasiado, porque si te vas soy un tigre encerrado, ira contra esos amantes que pueblan las fotos de tu pasado… es esa cosa que tiene tu padre porque sabe que no soy tu príncipe encantado...

AVARICIA porque no comparto tu risa, y te compro hasta los besos que no has dado, avaro porque enterré las promesas que nunca te he dado…

Y el pecado que falta, cariño,
te lo digo al oído y te lo enseño con las manos,
mi pecado preferido me lo callo, que hay gente escuchando…

Habla Pueblo, Habla.

Aviso que este post es pelín escatológico, pero necesito que hable la voz del pueblo...

Resulta que para ir a trabajar, compartimos coche entre algunos compañeros por aquello de ahorrar gasolina, no contaminar tanto, y entretenerte en el trayecto charlando un poco (a no ser que sea en el trayecto de ida, que yo no soy capaz de articular palabra a las 7 y media de la mañana).

Una de las compañeras a las que llevo tiene una especie de manía, TOC, o como sea, que le hace arrancarse pellejillos de piel de los bordes de las uñas. Es compulsivo, y yo sólo de verlo, intuirlo (o incluso escucharlo!) me dan arcadas. Pero esto no es lo peor, es que todo lo que se va arrancando lo deja en el asiento de mi coche y se queda tan pancha.

Cada puta semana me toca aspirar el coche muerta del asco, y cagándome en la mala educación y falta de respeto de esta mujer.

He compartido este problema con mis allegados y me han dado diferentes soluciones, pero la verdad es que aun no me he decidido por ninguna, y sigo aspirando mi coche cada vez que ella monta.

Entre las posibles soluciones me han propuesto:

- Decírselo directamente. Oye guapa, eres un poco cochina, te importa dejar tus jirones de piel en su sitio, o al menos en tu coche y no en el mío?

- Recoger cuidadosamente con un kleenex los trocitos y cuando me lleve ella en el suyo dejárselos allí, porque eso sí, ella lleva siempre el coche im-po-lu-to, y se daría cuenta.

- Comerme una bolsa de pipas y echarle todas las cáscaras cuando no se de cuenta.

En fin chicas, que es una cerdada lo que os estoy contando, pero es que cada vez que se monta en el coche me pongo de los nervios, me habla y solo me dan ganas de escupirle!

¿Qué haríais vosotras?

Por cierto, siento si os he puesto mal cuerpo... y por supuesto...

¡FELIZ FIN DE SEMANA!

Libre

Hay gente que divaga en su blog sobre si deja de escribir o no, que si se va pero luego vuelve, a lo Jesulín, a lo Mecano, ya me entendéis. Yo nunca me lo había planteado, es decir, si me apetece escribo y si no pues no. Casi siempre cada dos o tres días se me viene la inspiración, siempre con una gilipollez de mayor o menor envergadura, pero me da por postearlo.

Pero es cierto que existe esa llamada, y ultimamente aunque sigo escribiendo de forma habitual, me cuesta un poco más aunque no lo hago como un esfuerzo u obligación, claro está, que para obligaciones ya tengo otras mil.

Se han cerrado muchos blogs que me gustaban, o ya no postean con tanta frecuencia, ni mucho menos comentan, que al final es lo que le da vida a un blog. Digamos que he perdido un poco de fuelle, eso es todo. Me gusta seguir blogs, pero para eso hay que curiosear, enlazar uno con otro, o incluso encontrarte comentarios de gente y pinchar en sus enlaces.

En fin, reflexión tontorrona mientras hago tiempo para la última clase de hoy. Estoy cansada, los niños me han absorbido hasta la última gota de paciencia, de voz, e incluso vocación. Menos mal que me espera un buen fin de semana con planes tranquilos pero mmmuy apetecibles.

Ese puñado de blogueras en Madrid, que tenga cuidado no vaya a arder Chueca! Pasadlo teta! (aunque no hay ni que decíroslo)

Me gusta esta canción. Así me siento y así creo que hay que sentirse entre otras cosas dentro de una relación, o estarás perdida...

El Gordo y El Flaco

Tanto tiempo este fin de semana delante de este personaje, me ha hecho darme cuenta de la sutil metamorfosis que ha ido sufriendo a lo largo de los años...

El muy capullo ha ido dejando de beber su propio brebaje, hasta quedarse hecho un figurín! Ya ni siquiera necesita apoyar la mano en el barril para no perder el equilibrio! Apostaría a que ahora lo lleva relleno de Aquarius...

Y lo más grave... ¡Se ha blanqueado los dientes!

Eso sí, sigue manteniendo su corte de pelo a lo Bardem en "No es país para viejos"...

Si le damos una vuelta de rosca más, podremos encontrarnos esto dentro de unos meses... (olé por la vecina del quinto jaja!)

A su amigo Michelín le ha ocurrido algo parecido...

Y se rumorea que salen juntos por Chueca a lucir tipito por los bares más oscuros...

(¿Dónde están sus gafas? ¡Este se ha operado la vista!)

Una de las últimas juergas que se corrieron fue junto a Mariah Carey, que también vuelve loca a su báscula...

Que por cierto, me he vuelto fan de "Maráiah" desde que salió a recoger un premio por su actuación en "Precious" con un pedo like alfredo...

(Podría ser Amaia Montero y nadie se daría cuenta!)

En fin, quien esté libre de pecado que tire la primera piedra... (O seasé, dejad un comentario que estoy aburría de preparar y corregir examencitos!)